Cristina Kirchner encabezó este martes una reunión en el noveno piso de la sede del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata) en la que se mostró con todos los integrantes de su lista en el PJ, “Primero, la Patria”. El encuentro se realizó un día antes de que la Justicia, según se prevé, confirme la condena en su contra por la causa Vialidad. En la reunión, afirmó que la persiguen, pero que eso la hace más fuerte.
Si bien no hizo una mención explícita al fallo que se conocerá mañana y que podría ratificar su condena a seis años de prisión y dictarle una inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, la ex presidenta señaló: “Tengo muy claro por qué me persiguen. En el peronismo, estamos acostumbrados. Eso, lejos de amedrentarnos o hacernos retroceder, nos hace más fuertes”.
Cristina Kirchner llegó pasadas las 12.30 (ingresó sin bajar del auto Ford Mondeo negro directamente por el garage), cuando ya los integrantes de su nómina la esperaban dentro de la sede del gremio que conduce Ricardo Pignanelli.
Al cabo del encuentro habló el senador José Mayans, quien el próximo domingo quedará oficializado como uno de los vicepresidentes del PJ. “Algunos hicieron referencia a la persecución política. Puede ser la próxima presidenta, por eso la persiguen”, dijo el jefe del interbloque de Unión por la Patria en la Cámara alta. Y agregó: “Fue una reunión de trabajo, Cristina habló de organizar el partido, de convocar a otras fuerzas políticas”.
La reunión, en la que reaparecieron dirigentes como José Ottavis (uno de los iniciadores de La Cámpora, que se retiró del Smata junto a De Pedro), duró poco más de media hora. Según pudo saber LA NACION de una fuente que participó del encuentro, se trató de una bajada de línea partidaria de la expresidenta. “Habló de modernizar el partido, de agilizar los procesos de afiliación”, indicó la fuente, que aseguró que la reunión fue puramente partidaria.
Además, se entregaron certificados del PJ a los integrantes de la lista de Cristina Kirchner que formarán parte de la nueva conducción partidaria.
El senador Eduardo “Wado” de Pedro, antes de ingresar al encuentro, afirmó que “hay intención de proscribir” a la expresidenta. “Como no le pueden ganar en las urnas, como no pueden gobernar mejor que ella, acuden al Poder Judicial”, completó. En un sentido similar, se pronunció el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez. “Somos muchos los que opinamos que cierto sector del poder la quiere presa o muerta”, dijo a LA NACION.
El domingo próximo era el día previsto para la realización de la elección interna del PJ, que no se concretará porque la lista competidora de la de Cristina, que encabezaba Ricardo Quintela (gobernador de La Rioja) fue excluida por la Junta Electoral partidaria, en una decisión que refrendó luego la jueza con competencia electoral María Servini. Ese día (que el peronismo celebra como el Día de la Militancia), se realizará un acto en la provincia de Santiago del Estero, con la presencia de la expresidenta.
“Tenemos un padrón vetusto. Es un desafío fenomenal incorporar a generaciones nuevas, jóvenes que han ganado centros de estudiantes”, remarcó De Pedro antes del encuentro. Para Agustín Rossi, otro de los presentes, “es muy buena noticia para el peronismo y para la oposición que Cristina presida el peronismo”. Y subrayó: “Nos va a ordenar, va a ser una voz ineludible y va a dinamizar las estructuras del peronismo”.
Algunos de los dirigentes que estuvieron en la sede del Smata fueron Anabel Fernández Sagasti, Teresa García, Mayra Mendoza, Juan Manzur, Julián Domínguez, Leonardo Nardini, Felipe Solá, Germán Martínez, Federico Otermín, Víctor Santa María, Daniel Catalano, Mario Manrique, Agustina Propato, Vanesa Siley, Raquel “Kelly” Olmos, Eduardo Berrozpe, Armando Cabrera y Abel Furlán.
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