Al menos tres personas murieron el domingo en un ataque con proyectiles de mortero perpetrado por el grupo terrorista Al Shabaab contra una base militar en la capital de Somalia, Mogadiscio, que acoge numerosas instalaciones diplomáticas, incluidas la Embajada de Estados Unidos y la sede de la misión de Naciones Unidas.
El grupo, vinculado a la organización terrorista Al Qaeda, ha reclamado la autoría del ataque, que ha causado además daños materiales dentro de las instalaciones, situadas cerca del aeropuerto de Mogadiscio, sin que por ahora haya confirmación sobre las identidades de las víctimas, según el portal de noticias Somali Guardian.
La Misión de Transición de la Unión Africana en Somalia (ATMIS) ha condenado «firmemente» el «atroz» ataque y ha recalcado que el suceso «no disuadirá» a la misión ni a las fuerzas de seguridad a la hora de «buscar una paz y una seguridad duraderas en Somalia».
«Reafirmamos nuestro compromiso inamovible con la lucha contra el terrorismo y la construcción de una Somalia pacífica y próspera», ha dicho el jefe de la ATMIS, Mohamed el Amine Suef. La misión ha trasladado además sus condolencias a las víctimas del ataque, sin confirmar si hay bajas entre sus filas.
Sin embargo, fuentes de la Unión Africana (UA) consultadas por el portal de noticias Garowe Online han indicado que entre los muertos hay dos militares ugandeses integrados en la ATMIS. El Gobierno de Uganda tampoco se ha pronunciado sobre este extremo.
Somalia ha incrementado en los últimos meses las ofensivas contra Al Shabaab con apoyo de clanes y milicias locales como parte de una serie de decisiones adoptadas por el presidente, Hasán Sheij Mohamud, quien prometió al asumir el cargo en mayo de 2022 poner la lucha antiterrorista en el centro de sus esfuerzos para estabilizar el país africano.