21/12/2024 22:01hs.
Existen costumbres que se sostienen. Que no se cortan aun cuando cambian los nombres de pila. El ejemplo claro en Estudiantes es con Boselli: si está en el área en una final, hay gol. Antes Mauro, ahora Sebastián. Alto en el cielo de Santiago del Estero para meter, indirectamente, el 1-0.
Los estadígrafos con la certeza de las imágenes dirán que el gol fue de Tomás Marchiori. Tendrán siempre la razón empírica: la pelota dio en su espalda luego de rebotar en el travesaño.
Estudiantes de La Plata –
Cabezazo de Boselli para el 1-0 del Pincha
Video: TNT Sports
Un desvío artero que propició el primer grito de Estudiantes en el Madre de Ciudades. Aunque también es verdad que ni el poste ni el omóplato del arquero de Vélez habrían participado de esa creación si no hubiera saltado perfecto Boselli. Ganándole a su marca, a tres jugadores que intentaron infructuosamente -por pasividad- frenarlo.
Imponiéndose como indica el manual pincharrata en una pelota parada. Y comenzando a desnivelar el score.
Una promesa cumplida
El posteo de Fede Coria tras el 1-0 de Boselli.
Boselli lo hizo, pues. No estadística pero sí conceptualmente: su noveno partido en Estudiantes fue en el Trofeo de Campeones. Un grito que eligió dedicarle a Federico Coria, la Mojarra según su alias popular, con una celebración alegórica al apodo: un lanzamiento metafórico de caña de pescar y un servicio, todo para su amigo tenista.
Algo que ya le había anticipado vía chat: “Hago una mojarra y un saque”, le había prometido vía WhatsApp, tal y como figura en el chat que compartió el deportista argentino de 32 años, que agradeció vía X.
Boselli lo hizo al marcar su segundo gol en el club platense, donde se afianzó luego de los cuatro partidos perdidos por una lesión muscular en el bíceps femoral.
El uruguayo, campeón del mundo Sub 20 en 2023 con su selección, regresó al equipo ante River -justo ante River, club dueño de su ficha- y se consolidó como zaguero junto a Federico Fernández y/o Luciano Lollo.
El chat entre Boselli y Coria.
Cada vez más Pincha
Boselli llegó a Estudiantes “para crecer y mejorar”, según confesó apenas fue presentado, y luego de que Marcelo Gallardo le fuera sincero en relación a la escasa continuidad que le garantizaría en Núñez.
El Muñeco lo tendría relegado y desde La Plata, Eduardo Domínguez no dudó y fue a buscar a este back central con facilidades para jugar como lateral diestro, por el que Estudiantes estudia hacer una inversión para comprar un porcentaje de su pase. Y, de ese modo, asegurárselo sin tener que esperar a que expire la cesión que liga al uruguayo con ELP hasta diciembre del 2025.
Lo que hizo en Santiago, el grito eufórico con Santiago Ascacíbar, el desahogo personal y la alegría por su momento, hacen que su identificación pincharrata se consolide. Y que lo celebren todos como leones.
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