La mañana del domingo arrancaba en Villa Allende Parque, una humilde zona residencial al norte de la capital cordobesa, cuando un auto blanco atropelló adrede a una motocicleta en la puerta de un «after» clandestino. Según los reportes de medios locales, las personas involucradas habrían mantenido algún tipo de disputa dentro del lugar que llevó a una de las partes a continuarla fuera del boliche.
Aunque las autoridades aún no han podido determinar cuántas personas estuvieron involucradas en el incidente, sí se habría determinado que la disputa arrancó adentro del improvisado «after», última escala de quienes arrancaron la noche más temprano y cuando van pasando las horas y amenaza con clarear todavía quieren estirar la diversión antes de irse a dormir.
Alguna palabra de más, alguna mirada desafiante, quizás el nivel de alcohol excedido. Hubo una pelea adentro del «after» y el entredicho siguió en la calle, en la intersección de Rincón de Luna y Arroyo Cabral.
Las imágenes capturadas por la cámara de seguridad de una casa vecina muestran cómo, frente a un grupo de gente que hace gestos y grita, un auto blanco embiste violentamente, a alta velocidad y desde atrás, a una moto en la que iban dos personas, que salen despedidas por la fuerza del choque.
Antes de detenerse, el mismo auto chocó contra otra moto que estaba estacionada en la calle. Tras el incidente, el vehículo escapó del lugar.
Según relató un vecino al diario La Voz del Interior el conductor del auto y el de la moto “discutieron adentro del boliche y siguieron afuera. Pelea va, pelea viene, entre el del auto y la moto. (El conductor) Volvió y los chocó”.
Varios testigos afirmaron que los organizadores del «after» clandestino y algunos asistentes trasladaron a los heridos -serían cuatro en total los afectados con lesiones- hasta un centro médico cercano.
Un «after» que abre «una y otra vez» pese a las clausuras
El ministro de Seguridad cordobés, Juan Pablo Quinteros, le contó a Clarín que donde funciona el «after» clandestino ya hubo un procedimiento policial hace poco más de un mes, en el que se constató la venta de alcohol y la presencia de menores en un lugar que no cuenta con ningún tipo de habilitación.
«Hicimos el procedimiento con personal policial y de la Dirección provincial, y constatamos todo tipo de irregularidades. Pero se las arreglan para volver una y otra vez. Estamos decididos a terminar con esto, porque no pueden seguir funcionando en la clandestinidad», dijo Quinteros.
El ministro confirmó que una de las personas heridas fue trasladada hasta el centro de atención médica Cura Brochero y fue abandonada en el lugar por quien lo llevó hasta allí. En el centro médico se constató que tenía heridas diversas -traumatismos, fractura del tabique nasal, cortes-, pero el joven fue retirado por su familia cerca del mediodía.
BPO