Después de pasar varias vacaciones en Florida, Debra Pamplin decidió que quería cambiar de vida. En 2013, dejó Missouri y se instaló con su familia en Jacksonville. Sin embargo, 11 años después, regresó al Medio Oeste debido a una serie de dificultades que experimentó en el llamado Estado del Sol. “Soy mucho más feliz visitando Florida que viviendo allí”, aseguró la mujer al relatar su historia de migración.
Pamplin contó en una nota publicada por Business Insider que uno de los mayores inconvenientes que enfrentó fue el tráfico en Jacksonville. “Ser testigo de persecuciones a alta velocidad en la carretera interestatal, autos que no cedían el paso y camiones que se saltaban semáforos en rojo era parte de nuestra vida diaria”, relató.
El condado donde vivía, agregó, es conocido por tener algunas de las carreteras más peligrosas de Florida. Esta situación le generaba una preocupación constante, especialmente por su hija, quien debía conducir diariamente por la interestatal I-95 para ir al trabajo. “Aunque confiaba en ella como conductora, me preocupaba el resto de las personas que circulaban por las carreteras”, comentó la mujer.
Otro desafío importante que debió enfrentar Pamplin fue el alto costo del seguro en Florida, tanto del automóvil como de la vivienda Según un informe de MarketWatch, el valor promedio del seguro de un coche con cobertura total en este estado es un 42% más elevado que el promedio nacional.
“Florida es un ‘estado sin culpa’. Esto significa que, sin importar quién tenga la culpa en un choque, cada conductor debe confiar en su propio seguro para cubrir los gastos médicos y otras pérdidas financieras”, expresó, situación que eleva el precio de las pólizas. A este hecho se le sumó el valor de los seguros para el hogar, intensificado por los daños causados por huracanes recientes.
“Tenía que recortar gastos en otras áreas de mi vida solo para cubrir mis altos costos mensuales de seguro”, remarcó. Ahora, en el Medio Oeste, su gasto en seguros es menor: “Me permite usar mi dinero en cosas más divertidas”.
Aunque muchas personas disfrutan del clima de Florida, para Pamplin este fue un punto negativo. “Me costó mucho soportar el calor. Con tanta humedad, se sentía aún peor”, afirmó y luego agregó: “El calor y la humedad me impidieron disfrutar plenamente de todas las hermosas actividades y atracciones al aire libre en Florida. A menudo prefería quedarse en casa con aire acondicionado en lugar de salir”.
Otro factor que la hacía desistir de salir eran los mosquitos. Por el clima y la humedad, el estado alberga gran cantidad de estos insectos y Debra es alérgica a sus picaduras, por lo que las sufría aún más: “A veces, dejaba de salir por las noches para evitar que me picaran”, señaló la mujer, quien destacó que aunque usaba repelente “no siempre fue muy efectivo”.
Pamplin decidió volver al Medio Oeste de Estados Unidos y aseguró que ahora disfruta de “una vida más tranquila, con un clima más adecuado” para sus preferencias y menos preocupaciones financieras y de seguridad. “Me alegro de haberme mudado de nuevo”, concluyó.