El caso de la muerte de Sergio David Díaz, el colectivero de la línea 109 que fue asesinado de un disparo por su vecino, el expolicía Rafael Horacio Moreno, tras una discusión por el volumen alto de la música durante los festejos de Navidad en Lomas del Mirador, continúa avanzando y ya se conoció la fecha en la que se realizará el juicio. A ocho meses del crimen, su familia pidió que el hombre que será juzgado por un jurado popular, «pague por lo que hizo».
El hecho ocurrió en la madrugada del 25 de diciembre pasado, en el cruce de las calles Gamboa y Larraya de la localidad ubicada en el partido de La Matanza. Díaz, de 40 años, celebraba con su familia en la vereda de la casa de su tía cuando el exagente de la Policía Federal, de 74 años, inicio el reclamo que derivó en la discusión fatal. Toda la secuencia fue captada por el celular de un testigo y una cámara de seguridad, y Moreno quedó detenido ese mismo día.
Otro video muestra el disparo fatal con el que ex policía mató al colectivero
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“No tuvo ni un poco de piedad, queremos que pague por lo que hizo. Él tiró a matar y, tranquilamente, podría haber matado a cualquiera», señaló Yamila, prima de Sergio, al recordar el momento. En ese sentido, precisó que el juicio por jurados -que será dirigido por la jueza Lucila Pacheco, del Tribunal Oral en lo Criminal N° 2- comenzará el 4 de noviembre próximo.
«Al momento de disparar no le importó nada”, continuó diciendo la mujer acerca del exintegrante de la fuerza de seguridad, a quien se le rechazó la prisión domiciliaria a mediados de mayo pasado tras un informe psicológico adverso. En ese momento, el juez de Garantías Pablo Agustín Gossn interpretó que debido a los rasgos de su personalidad (como indicadores de agresividad encubierta) no respetaría una medida menos restrictiva que la cárcel.
“Ni siquiera fue capaz de decirle se me escapó el tiro, perdón, o algo, como dijo en su primera declaración, no tuvo arrepentimiento», agregó en diálogo con el medio local El1Digital, haciendo referencia a la explicación que Moreno dio a las autoridades cuando fue arrestado.
Moreno llegará al debate imputado por «homicidio agravado por el uso de arma de fuego» y «tenencia ilegal de arma de guerra», ya que el revólver que utilizó no estaba habilitado. Su defensa está en manos de Francisco Oneto, abogado del presidente Javier Milei en el caso de la cripto $LIBRA y que integra el equipo del neurocirujano Leopoldo Luque en el juicio por la muerte de Diego Maradona, mientras que el fiscal a cargo será Sergio Antín.
En ese contexto, Yamila manifestó que tanto el fiscal Antín como el abogado de su familia le indicaron que «es favorable tener juicio por jurado” y consideró que por las pruebas de público conocimiento «es evidente que este señor lo mató«.
Discusión por la música y la reacción de los vecinos
Toda la secuencia fue grabada de cerca por un testigo en la madrugada del 25 de diciembre. En un momento se observa cuando Moreno y Díaz comienzan a discutir, el policía jubilado le muestra su revolver calibre 38 y después se lo apoya en el estómago. Antes les había advertido que la situación “iba a terminar mal” si no accedían a su pedido.
“¿Qué me sacas el fierro? ¿quién te crees que sos?”, le recriminó la víctima al ex efectivo que, en uno de los instantes de mayor tensión, le disparó al chofer. Díaz fue trasladado de urgencia por su familia, pero murió horas después en un hospital local.
La autopsia determinó que el colectivero murió por un disparo que “ingresó por el abdomen y salió por el dorso”, causándole «lesiones internas que derivaron en su muerte”. Durante la indagatoria, Moreno afirmó que el tiro fue accidental y que en ningún momento tuvo «intención de abrir fuego».
En las horas posteriores al asesinato, hubo momentos de fuerte tensión en la cuadra. Un grupo de familiares de Díaz increparon a la pareja de Moreno, que tuvo que ser retirada del lugar más tarde en un patrullero. El video se viralizó y dividió las opiniones en las redes sociales: algunas personas justificaron el accionar del expolicía, otros condenaron su reacción.
Ahora, el hombre de 74 años será juzgado por un jurado popular por un delito que contempla penas de entre 8 y 25 años de prisión.
FP/fl